Ha partido a la casa del Señor, don Luis Alfonso Márquez (Q.E.P.D.), hombre de extraordinarias cualidades humanas, familiares, ciudadanas, amigo de La Opinion Cojedes, siempre dispuesto a la alegre tertulia y a tender la mano a quien le solicitara cooperación.
La familia Napolitano Serradimigni, hace llegar a su esposa Urbana Alvarado de Márquez, a sus hijos (Katiuska, Luis Alfonzo, Karina, Karelys, Luis Andrés, Luis Rafael, Rober, Leovardo, Joel) a sus nietos y todos sus familiares y amigos, su mensaje de pesar por tan irreparable pérdida. Pero a la vez envía un mensaje de esperanza y fortaleza en Dios Todopoderoso, porque sabemos que el Creador por su gran misericordia le dará la luz y el descanso eterno.
Luis fue un amante de la justicia y la verdad, del trabajo y la bondad humana, por eso ganó amistades y el respeto de sus coterráneos.
Sus restos están siendo velados en la Funeraria Virgen del Valle, en calle Sucre c/c Ayacucho, San Carlos, y el sepelio se efectuará este martes 31 de marzo de 2020, a las 10 de la mañana en el cementerio municipal al final de la calle Sucre.
Este inolvidable amigo, conocido cariñosamente como «EL NEGRO» MÁRQUEZ, quedará inscrito en las páginas del cariño popular, en San Carlos, pueblo al que quiso como el que más, donde se desempeñó también como empresario de la construcción y donde sembró una familia enraizada con valores y sentido de confraternidad.
No te decimos Adios, hermano, sino hasta luego, porque un día en la paz del Señor te encontraremos de nuevo para la eternidad….
BREVE RESEÑA BIOGRÁFICA DE «EL NEGRO» MÁRQUEZ…..
Luis Alfonzo Márquez Peña nació en Chejendé, Edo. Trujillo, el 19 de Febrero de 1938 donde vivió hasta los 8 años, aproximadamente. Se crió en la ciudad de Caracas donde se formó en una escuela militar la cual le motivó a iniciarse al servicio del país incorporándose alrededor de 10 años al Departamento de Seguridad del Estado (DIGEPOL) en los gobiernos de Rómulo Betancourt, Raúl Leoni, Rafael Caldera y Carlos Andrés Perez. En 1968 llega al Estado Cojedes como Comisario en Jefe de la DISIP y luego de un tiempo lo trasladan a Puerto Ordaz, pero antes contrae matrimonio con su amada Urbana Alvarado.
Posteriormente es trasladado a Nueva Esparta donde no duró mucho porque decidió regresar al Estado Cojedes para dedicarse a su familia e incursionar como Empresario en el área de la Construcción.
Fue un emprendedor entusiasta que se crecía en las adversidades, gracias al apoyo de su familia… con el amor de siempre se mantuvo hasta el final, como buen trujillano que se asimiló a Cojedes con pasión y entrega.